Pero en los tiempos en los que vivimos el mercado nos brinda (a algunos privilegiados del primer mundo) la posibilidad de hacer uso de las tecnologías de la información y la comunicación (TIC). Aprovechamos entonces para hacer reuniones incluyendo así a personas que en la distancia desean (y logran) hacerse presentes en nuestras reuniones, como es el caso de Kike (que actualmente reside en Alicante por motivos laborales) y de Cris (que se mueve entre Palencia, Valladolid y Salamanca por motivos académicos).

Agradecemos desde aquí a quienes hacen posible hacer frente a estos límites humanos (científicos, informáticos, trabajadorxs...) y aprovechamos también para denunciar el abuso de quienes monopolizan el negocio de las telecomunicaciones y permiten la explotación de cientos de miles de personas (en muchas ocasiones niñ@s) que viven por unos gramos de ese preciado mineral necesario para su negocio (y nuestra necesidad): el coltán.
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